fragmentos atemporales


.

Photo.M.E



El único Tiempo por el que me intereso es el tiempo detenido por mí y del cual mi mente se ocupa en una intensa atención voluntaria. Así, pues, sería ocioso y erróneo mezclar con él el tiempo "que pasa". Sin duda, tardo "más tiempo" en afeitarme cuando mi pensamiento "ensaya" palabras; sin duda, no soy consciente de que me retraso hasta que consulto el reloj; sin duda, a los cincuenta años, me parece que el tiempo del calendario corre más deprisa, porque se da en fracciones que constituyen fragmentos cada vez más pequeños de mi creciente fondo existencial, y también porque me aburro menos de lo que me aburría de niño, entre un juego tedioso y un libro más tedioso todavía. Pero esa "aceleración" depende precisamente de que no atendemos al Tiempo.





Vladimir Nabokov
Ada o el ardor






. Vladimir Nabokov . San Petersburgo . Rusia . 1899 . Montreux . Suiza . 1977
  Versión .David Molinet


.